La eficiencia energética es un factor clave en la gestión hotelera moderna, especialmente de cara a la temporada de verano. En esta época del año, el incremento de la ocupación trae consigo un aumento significativo en los consumos de electricidad, agua caliente y climatización. Preparar tu hotel para este escenario con un enfoque claro en eficiencia energética no solo reduce costes operativos, sino que también mejora la experiencia del huésped y refuerza la sostenibilidad de tu establecimiento.
En este artículo, te compartimos las principales áreas donde puedes aplicar mejoras reales en eficiencia energética para afrontar el verano con éxito.
🌬️ Climatización: eficiencia energética sin sacrificar confort
En verano, los sistemas de climatización pueden llegar a representar hasta un 60 % del consumo energético en algunos alojamientos. Y aunque mantener el confort térmico es imprescindible, no tiene por qué suponer un exceso de consumo si se aplica tecnología eficiente y una buena gestión.
¿Qué puedes hacer?
Sustituye equipos antiguos por modelos inverter o con certificación energética A o superior, que regulan su potencia de forma inteligente.
Instala sensores de presencia y apertura de ventanas: cuando la habitación está vacía o se detecta ventilación natural, el sistema se apaga automáticamente.
Establece temperaturas estándar de eficiencia (23–25 °C), con comunicación clara al huésped sobre su beneficio medioambiental.
Asegúrate de realizar mantenimientos preventivos antes del verano, ya que filtros sucios o piezas desgastadas elevan el consumo sin mejorar el rendimiento.
👉 Un sistema bien configurado puede ofrecer el mismo confort con hasta un 30 % menos de consumo.
💡 2. Iluminación: mucho más que cambiar bombillas
Optimizar el sistema de iluminación es una de las formas más directas y rentables de mejorar la eficiencia energética en cualquier hotel. Aunque muchas instalaciones ya han migrado al LED, aún hay oportunidades de mejora.
Buenas prácticas:
Sustituye cualquier bombilla halógena o incandescente restante por tecnología LED: menor consumo, mayor vida útil, y mejor iluminación.
Usa sensores de movimiento y temporizadores en zonas de paso (pasillos, escaleras, baños públicos, almacenes).
Instala sensores crepusculares en exteriores: activan automáticamente la luz cuando baja la luz natural.
Revisa la decoración y distribución de espacios: colores claros y buena entrada de luz natural reducen la necesidad de iluminación artificial.
💡 En zonas comunes, estos ajustes pueden suponer hasta un 40 % de ahorro en iluminación eléctrica.
🚿 Agua caliente sanitaria: clave para la eficiencia energética
El consumo de agua y, especialmente, de agua caliente, se dispara con la ocupación. Cada ducha larga representa un gasto doble: en agua y en energía para calentarla. Por eso, actuar sobre estos puntos tiene un retorno inmediato.
Acciones recomendadas:
Instala reductores de caudal en duchas y grifos: mantienen la sensación de presión pero reducen el consumo entre un 30 % y un 50 %.
Emplea tecnología de aireación en cabezales y perlizadores: mezcla aire y agua para crear un chorro envolvente con menos litros/minuto.
Revisa el sistema de producción de agua caliente y asegúrate de que las pérdidas térmicas están controladas.
Ofrece incentivos al huésped para reducir cambios de toallas, y promueve la opción de renunciar a la limpieza diaria a cambio de una acción con impacto (como retirada de plástico del mar, por ejemplo).
💧 Además del ahorro, estarás reduciendo tu huella hídrica y mejorando tu imagen como hotel consciente
📊 4. Control y monitorización: lo que no se mide, no se mejora
Tener visibilidad sobre tus consumos energéticos es tan importante como las medidas técnicas. Sin datos, no hay toma de decisiones eficaz.
¿Por dónde empezar?
Instala sistemas de medición energética por zonas (habitaciones, cocina, lavandería, zonas comunes, etc.).
Monitoriza consumos en tiempo real para detectar desviaciones, anomalías o consumos fantasma.
Establece rutinas de revisión de datos y objetivos mensuales por área.
Considera la implementación de baterías con inversores inteligentes o sistemas híbridos (solar + red) para autoconsumo parcial.
Y recuerda: muchas mejoras pueden acogerse a incentivos y líneas de ayuda públicas, como los Certificados de Ahorro Energético (CAEs) o fondos NextGen.
📉 Una buena gestión energética puede reducir tu factura global entre un 10 % y un 25 %.
🌿 5. Implica a tu huésped y comunícalo con orgullo
Hoy más que nunca, los viajeros valoran alojamientos comprometidos con el planeta. Pero para que esa percepción sea real, hay que comunicarla:
Señaliza de forma clara (pero elegante) las iniciativas sostenibles en la habitación y zonas comunes.
Explica por qué se usan ciertos productos, sistemas o amenities ecológicos.
Anima al huésped a colaborar, por ejemplo, renunciando a la limpieza diaria a cambio de un impacto positivo (como en nuestro caso con Gravity Wave).
Incluye tu política de sostenibilidad en tu web, OTA y comunicaciones pre-estancia.
🗣️ Una buena historia de sostenibilidad puede ser tan potente como una buena reseña.
Conclusión
La temporada alta puede ser una gran oportunidad para mejorar rentabilidad, reputación y compromiso medioambiental. Con pequeños cambios y decisiones inteligentes, puedes generar un gran impacto operativo y emocional en tus clientes.
En ECO-ONE trabajamos junto a cientos de hoteles que ya están avanzando hacia un modelo más eficiente. Desde equipamiento sostenible hasta reducción de consumos, te ayudamos a implementar soluciones reales, prácticas y con retorno.
¿Qué son los CAEs?
¿Qué tipo de mejoras energéticas se pueden certificar con los CAEs?
¿Cuánto puedes ganar con los CAEs?
