Cuando hablamos de productos biodegradables, nos referimos a la posibilidad que poseen algunas sustancias para descomponerse en otros componentes químicos y, por lo tanto, reintegrarse a la tierra (proceso del carbono) con las condiciones ambientales idóneas.
En el momento que la Comisión de Medioambiente del Congreso de los Diputados acordó la prohibición de platos, vasos, cubiertos o pajitas de plástico a partir de 2020, se evidenciaba la problemática medioambiental que suponía el uso de estos materiales. En su lugar, se sustituirán por utensilios que estén compuestos por un 50% de materiales biodegradables y, a partir de 2025, compuesto por un 60%. En este sentido, las empresas turísticas y los hoteles están trabajando en diferentes medidas con el fin de cumplir con la normativa. Recientemente en un artículo publicado en Tourinews, Bartolomé Coll Florit, director de Vitalclass, destacaba que se han tomado muchas medidas “como la implantación de plantas de jabonosas y depuradoras, el riego con agua depurada, la reducción de envases y de consumo de agua, o medidas anti contaminación lumínica”, pero lamentó que “apenas se ha hecho nada con el tema de plásticos”.
Medidas tomadas por grandes cadenas hoteleras:

1. En Iberostar Hotels & Resorts, han sustituido las botellas de politereftalato de etileno, que tienen su uso habitual en las habitaciones y los minibares de los hoteles, por vidrio y cartones compostables con el objetivo de dejar de utilizar 1,5 millones de botellas de plástico al año. Esto supone la reducción de casi 43 toneladas de basura, ya que también se han encargado de eliminar los recipientes de plástico de sus oficinas, sustituyendolas por botellas rellenables que la empresa comenzó a distribuir en el verano de 2018 en sus sedes de Riviera Maya (México) y Palma (Mallorca).En total, se dejarán de utilizar más de 70.000 botellas de plástico al año.
2. Room Mate Hotels ha apostado por otra solución a través de la empresa AUARA, la marca de agua solidaria que no solo utiliza envases con material 100% reciclado, sino que destina el 100% de sus dividendos a proveer de agua potable a poblaciones de países en desarrollo que carecen de ella.
3. El hotel Lopesan Costa Meloneras, en Gran Canaria, ha sustituido los vasos desechables por vasos de policarbonato. David Morales, director de este hotel, explicó a Tourinews que no solo suponen un beneficio para el medioambiente, puesto que son totalmente reutilizables, sino que son especialmente útiles para zonas donde el cristal está totalmente prohibido como las áreas de piscina.

4. La compañía RIU Hotels & Resorts apostó desde verano de 2018 por ofrecer pajitas compostables en todos los hoteles de España, Portugal, Cabo Verde y América. Estas pajitas son 100% biodegradables y además se compostan, es decir se degradan en contacto con el resto de residuos orgánicos convirtiéndose en compost o abono.
5. Muchos hoteles han establecido en sus menajes, utensilios de semillas de aguacate. Este sustitutivo a los plásticos o metales, se desarrollan a través de una tecnología que permite crear un biopolímero mediante las semillas de aguacate. Este estudio, fue investigado y llevado a cabo por el químico mexicano Scott Munguia para producir pajitas y cubiertos que toleran perfectamente el frío y el calor.
6. En los hoteles también hay una gran presencia de bolsas de plástico. Una buena alternativa son las bolsas de almidón de yuca desarrolladas por el biólogo indonesio Kevin Kumala. Con un precio económico, las bolsas, que visualmente y al tacto son muy parecidas a las comunes, si éstas acaban en el mar, se convierten en agua y alimento para los peces, así como compost.

Ventajas principales del uso de productos biodegradables:
- Son productos que se consumen rápidamente. Al ser biodegradables, la propia naturaleza lo va degradando de manera continua ayudando a que no acaben contaminando el entorno.
- Reducen las emisiones de dióxido de carbono. Durante la producción de bioplásticos se emiten gases como el CO2, pero es mínima comparado con el proceso de fabricación de los plásticos comunes.
- Consumen menos energía. Al fabricarse con materiales biodegradables, requieren menos energía y no requieren combustibles fósiles para su fabricación.
- Son reciclables. Al igual que los plásticos convencionales, estos se pueden reciclar para dar de nuevo productos al ciclo de vida útil ya que no contienen ningún tipo de químico ni toxinas en comparación con otros tipos de plásticos.
- Son compostables. Ayuda en el proceso de degradación y composición del suelo para la agricultura.

En definitiva, el uso de productos biodegradables conlleva a una mejor conservación del entorno, a una reducción considerable de las emisiones de CO2 y a un compromiso palpable por parte de las grandes cadenas que implementan medidas para dar solución a esta problemática mundial.